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Más de 400 fármacos para dolencias leves están excluidos desde hoy de financiación

Un total de 417 fármacos quedan desde hoy, 1 de septiembre, excluidos de la financiación pública en toda España. Los pacientes deberán abonar íntegramente el precio de estos medicamentos, todos ellos indicados para dolencias menores, tales como irritación de la piel, tos, acidez, diarrea o estreñimiento.
Desde los colegios farmacéuticos gallegos alertan de que muchos de los medicamentos desfinanciados son de "elevado consumo" y sostienen que niños y crónicos serán los más afectados por esta medida, que se engloba en la política del Ministerio de Sanidad para garantizar la viabilidad del Sistema Nacional de Salud, sobre el que pesa una deuda de más de 16.000 millones de euros y con la que se aspira ahorrar más de 450 millones de euros.
Con esta revisión, según la ministra de Sanidad, Ana Mato, "se deja de financiar medicamentos no esenciales y así se asegura el acceso a todos los fármacos necesarios para las enfermedades que ponen en peligro la vida de los ciudadanos, sin importar su coste".
Según Sanidad, España se mantiene como uno de los países europeos con más fármacos financiados, de modo que, junto con Francia e Italia, es el único que supera los 10.000 productos con cargo a fondos públicos, en concreto, más de 18.000.
Algunos de los productos que se han quedado sin financiación son Almax (antiácido), Emportal, Duphalac o Plantago (laxantes), Fortasec (antidiarreico) y pomadas para aliviar el dolor causado por la artritis como Fastum, Calmatel, Movilisin, o para afecciones inflamatorias como Zenavan. Los usuarios también deberán pagar por Mucosan o Pectox (para la tos), y por fármacos para el tratamiento de la rinitis alérgica, como Rinomax, además de por la acetilcisteína para patologías neumológicas, entre otros. No obstante, algunos de los tratamientos incluidos en la lista seguirán teniendo financiación pública cuando sean indicados para patologías concretas como, por ejemplo, el cáncer, enfermedad inflamatoria intestinal o paraplejia, entre otras.
A pesar de esta exclusión, todos los que están incluidos en la lista se deben seguir recetando cuando el médico lo considere apropiado, aunque el paciente tendrá que abonar su coste íntegro.
El PSOE pide la retirada de la reforma sanitaria
La secretaria de Política Social del PSOE, Trinidad Jiménez, reclamó ayer al Gobierno que rectifique y no ponga en marcha hoy la reforma sanitaria, ya que crea un "monstruo de Frankestein de 17 cabezas" pues cada comunidad autónoma "hará lo que quiera" en relación a la atención a los inmigrantes irregulares. Así se pronunció la dirigente socialista después de que el líder del partido, Alfredo Pérez Rubalcaba, se reuniera con portavoces de la Organización Médico Colegial (OMC) y de la Confederación de Asociaciones de Padres y Madres de Alumnos (CEAPA).
"Las comunidades autónomas se han encontrado con una situación imposible. Ante la decisión del Ministerio de Sanidad las comunidades se encontraron con una situación muy difícil de resolver", señaló Jiménez, que hizo hincapié en que las del PSOE dijeron desde el principio que iban a seguir atendiendo a los inmigrantes irregulares. Una postura que contrasta, según dijo, a la de otras gobernadas por el PP, que indicaron que van a atenderlos, pero "que les van a cobrar".
claves
El Ministerio de Sanidad excluye desde hoy de la financiación pública un total de 417 fármacos. Se trata de medicamentos indicados para dolencias leves y también más comunes, como son la irritación de la piel, tos, acidez, diarrea o estreñimiento.
De ellos, 97 mantendrán la subvención si se recetan para enfermedades consideradas graves o crónicas.
Todos ellos podrán continuar siendo prescritos por los médicos si lo consideran apropiado, pero su coste correrá a cargo del usuario.

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